TEATRO ALHAMBRA
Pepe y Cipri reproducen obsesivamente una misma situación, un momento concreto de sus vidas o…de su muerte. El tedio y la carencia de significado de su existencia o inexistencia les lleva a la desesperación, la abulia, al encuentro y desencuentro con personas o seres que han debido de estar o están en algún momento de sus vidas, o tal vez… en sus mentes aún errantes. Quieren descansar en paz y salir de ese anonimato maltratador que los desconcierta y los humilla; ellos esperan…y esperan…y esperan… y siguen esperando el momento de recuperar su dignidad y su historia. Lo llevan haciendo durante cada segundo, cada minuto, cada hora y cada día de los 78 años que llevan mal enterrados, pero no olvidados.