Desde el flamenco, se muestra una visión contemporánea del pecado. Siete visiones diferentes del mal y como este caos, nos destruye.
Los pecados se han transformado, vicios, violencia, deseos descontrolados, consumo o destrucción, conviven en nuestra sociedad. Lo vemos cada día, a tanta velocidad, que siendo espectadores, víctimas o verdugos, creemos ser ajenos a este mal y a la realidad que nos acecha, de la que sin duda, sin darnos cuenta… estamos condenados.
Basado en el texto “Los Siete Pecados Capitales” donde siete dramaturgos diferentes y bajo la dirección de Alfonso Zurro, dieron vida a esta particular versión del pecado.