Es un espacio que muestra una representación de la singular flora del Parque Natural Los Alcornocales, formada por verdaderas joyas botánicas, con especies únicas en el mundo como el ojaranzo, auténtico superviviente de épocas pasadas. En su interior, un agradable itinerario recorre las distintas formaciones vegetales que se desarrollan en este sector: los famosos canutos (cabeceras de los ríos y arroyos), quejigares, alcornocales, robledales, bosques de niebla, acebuchales, bujeos, bordes de lagunas y herrizas... las cuales crecen asociadas a los distintos sustratos geológicos presentes en este espacio natural. Además, este lugar ofrece la oportunidad de conocer aquellas especies que se encuentran amenazadas por distintos factores y en cuya conservación se está trabajando.