Wallada bint al-Mustakfi murió en Córdoba el 26 de marzo de 1091, coincidiendo con la entrada de los almorávides en la ciudad. Con motivo de los 930 años de su desaparición y con el vigésimo primer aniversario de la publicación de Wallada, la última luna, la sede de Casa Árabe en Córdoba y Matilde Cabello rinden homenaje, un año más, a la célebre poetisa Omeya, recreando los poemas y la vida de la célebre princesa, mediante un recorrido por los espacios de la Córdoba Califal que inspiraron su primera biografía novelada en el año 2000:
“Estoy hecha, por Dios, para la gloria, y camino, orgullosa, por mi propio camino. Doy poder a mi amante sobre mi mejilla. Y camino orgullosa por mi propio destino. Así rezaban los versos esculpidos en hulla amarilla sobre mis hombros cuando yo, Wallada la Omeya, era ya conocida como La Safo de Córdoba y el poeta Ibn Zaydun me inmortalizó en sus versos. (…) Si algún día vas a Marrakech y descalzas tus plantas en cualquiera de sus mezquitas, recuérdame frente al mihrab y pídele a los músicos y a los encantadores de serpientes de Yamá al-Fená que festejen a la luna en mi nombre. Agradece de este modo su despedida y hazle saber que mi cuerpo reposa para siempre en el arrabal de Shacunda del otro lado del Wadi al-Quebir. Cuéntale cómo es Córdoba desde mi última morada y dile que, desde allí, esperaré cada noche para verla dibujarse sobre el alminar de la Gran Mezquita”.