No debe pasar desapercibida la última película de Carlos Vermut, la inquietante y perturbadora “Mantícora”. En las nominaciones a los Goya ha quedado injustamente relegada a solo cuatro categorías aunque, eso sí, relevantes: mejor dirección y guión para Carlos Vermut así como para la pareja de actores protagonistas, Nacho Sánchez y Zoe Stein, ambos muy acertados.

En los dos primeros tercios de la película, el espectador asiste a una historia de chico encuentra chica pero en la que se apuntan rasgos de la personalidad de su protagonista que le confieren un carácter no tan convencional. Él diseña seres monstruosos para videojuegos mientras que ella cuida de su padre, recluido en una cama. Son personajes con heridas familiares que encuentran en el otro un apoyo del que carecen. Toda la serenidad con la que transcurre la película se ve interrumpida en la parte final con un pequeño hecho que desencadena un desmoronamiento similar al de un castillo de naipes.

Con “Mantícora” se confirma el interés de Carlos Vermut por las relaciones paternofiliales, como ya apuntaba en “Diamond flash”, “Magical girl” y su película más comercial hasta el momento, “Quién te cantará”, solo que en ésta ambas figuras masculinas son sustituidas por madre e hija. Al igual que en “Quién te cantará”, en “Mantícora” hay una doble relación, la puramente familiar y otra derivada, que tiene lugar al final de la película.

Es de destacar el uso de la música y la ausencia de la misma a lo largo de la película, especialmente cuando el niño toca el piano sin que se le vea, momento especialmente brillante en el que Vermut opta por la sutileza y la elegancia de sugerir en lugar de la obviedad de mostrar.

https://youtu.be/Mo462daEhgA

Guión y dirección: Carlos Vermut
Fotografía: Alana Mejía González
Montaje: Emma Tusell
Intérpretes: Nacho Sánchez, Zoe Stein, Catalina Sopelana, Javier Lago, Patrick Martino, Ángela Boix, Álvaro Sanz Rodríguez y Miguel Insúa.