Valeria Cossati vive sofocada por las convenciones sociales de la Italia de los años cincuenta, atrapada entre sus roles de esposa y madre. Presa de un impulso inexplicable, compra un pequeño cuaderno en el que anota sus reflexiones y donde comienza a revelarse lo insatisfactorio de su vida burguesa: en ese espacio prohibido que le proporciona la escritura van aflorando conflictos subterráneos y resentimientos ocultos.