«Al principio de todo está Él». De esta forma, Rosi Braidotti, tal vez la principal pensadora del posthumanismo, declina su particular Génesis humanista al inicio de Lo posthumano. En el principio del humanismo está Él, el Hombre, «la medida de todas las cosas» (según Protágoras), el mítico Hombre vitruviano dibujado por Leonardo da Vinci, el sujeto racional cartesiano, el que kantianamente se da sus propias leyes, el ciudadano titular de derechos de la revolución francesa… La genealogía del Ser Humano (en la versión humanista) es brillante, y su leyenda continúa alimentando la imagen que nos hacemos de nuestra propia especie.
Rosi Braidotti, en este original ensayo, plantea una alternativa superadora a un Humanismo que se ha vuelto omnipresente (impulsado sobre todo por los actuales progresos científicos y los intereses de la economía flobal) y que históricamente ha escapado con astucia a los esfuerzos delimitadores de la teoría crítica. De este modo, lo posthumano, como posibilidad de superación de lo dado, aporta un significativo cambio de rumbo en el modo de entender las características fundamentales de nuestra especie, nuestra política y nuetra relación con los demás habitantes del planeta. Al mismo tiempo, plantea una serie de nuevos interrogantes en torno a la estructura misma de nuestras identidades compartidas.