Frente a la actual «panoplia de zapadores» de la Constitución que busca dividir el país –nacionalistas, populistas, antisistemas–, los firmes partidarios de la libertad y la democracia van reculando en sus posiciones hasta conformar un «ejército de descontentos acobardados».
Esta es la razón principal que impulsó a Alfonso Guerra, político orgulloso de la Transición que nos «devolvió la dignidad», a escribir La España en la que creo.
Es urgente, según el autor, evitar la deriva hacia la desaparición del Estado, así como la vuelta al cainismo histórico de la vida española. Es urgente proporcionar a los más jóvenes datos reales como prevención de arriesgadas aventuras políticas y garantía de convivencia pacífica. Porque, cuando en una patria se dispara la intransigencia, todo se vuelve frágil.