La ópera cómica de Manuel Penella llega al coliseo jerezano bajo la dirección escénica de Emilio Sagi. La trama se inspira el El sí de las niñas, de Moratín, con una cándida historia de amor entre dos jóvenes -Niña Estrella y Don Gil- que se ve entorpecida por un tercero en discordia, pero la complicidad de los sirvientes y el pícaro sargento, que canta al vino de Jerez, perfilan una obra de trazo elegante. Un neoclasicismo musical a la española con aires del virreinato de Nueva España que mezcla lo hilarante con la enorme belleza de su música.