Exposición individual de Daniel Verbis donde, en esta ocasión, reivindica la fisicidad y pone en primer término el «mobiliario emocional» del artista.
Con las piezas que utiliza en sus esculturas, en cierto modo, se plantea una cuestión de género, al reivindicar una cierta fragilidad de lo masculino. Mostrar lo masculino como lo fuerte es tan mentiroso como lo contrario.