La muestra que cuenta con 36 fotografías, combina la iconografía habitual de la Semana Santa con malagueños anónimos fotografiados por Ricardo Ballesteros Liñán a lo largo de sus 40 años dedicados a la fotografía. Estas personas aparecen introducidas en blanco y negro en unos escenarios malagueños en color conformando unos montajes fotográficos que rozan lo onírico y reflejan la esperanza de los personajes de encontrar una vida mejor y de recibir de Jesús la caridad que necesitan. Por su parte, los nazarenos y otros personajes de la Semana Santa muestran su sueño de mostrar su amor hacia sus sagrados titulares, situándose en los escenarios donde éstos están situados: lugares de Málaga parecidos o semejantes a los lugares donde tuvo lugar la Pasión de Jesús.