Son las Fiestas por excelencia de Sorbas. A ellas acuden todos sus vecinos, gentes llegadas de afuera y los sorbeños, que un día tuvieron que abandonar su pueblo, vuelven a él a reencontrarse con sus familiares y amigos, con sus raíces, pues quién pierde sus orígenes pierde pierde identidad. Durante las fiestas el pueblo se viste con sus mejores galas: bombillas, banderolas, guirnaldas. También todas las calles se llenan de casetas de feria, atracciones infantiles, autos de choque, puestos de dulces. La plaza del pueblo, (la plaza de la Constitución,) todas las noches se llena de gente que baila a los sones de las mas aclamadas orquestas del momento y se convida, junto a familiares y amigos, en las terrazas que hay alrededor de ella. La semana anterior a la feria se celebra la Semana Cultural, con gran cantidad de actividades culturales y deportivas. El programa de las fiestas tiene para todos los gustos: actuaciones musicales, conciertos, bailes en la plaza, bailes regionales, espectáculos infantiles, competiciones deportivas, funciones de teatro, exposiciones, fuegos artificiales y hasta algún año se han atrevido con una corrida de vaquillas. El día 16 de agosto es el día grande. Es el día de San Roque. El Santo Patrón es llevado en procesión por todo el pueblo acompañado de las autoridades, el cura y la reina de las fiestas, seguidos de la banda musical y los vecinos. A la cálida y entrada del Patrón de la iglesia cientos de cohetes explotan por los aires y a su paso por las calles, desde los balcones, se lanzan roscos en su honor, que son cogidos al vuelo por pequeños y mayores. Es costumbre hacer "mandas" (Promesas) a San Roque, rogándole por la salud de algún ser querido. Al día siguiente tiene lugar, en el barrio de Alfarerías, la procesión de San Roquillo, que es paseado bajo un continuo lanzamiento de cohetes que hace temblar todo el pueblo y por supuesto lanzamiento de roscos.